Cansada de la monotonía, Jho decide empezar a matar... por distracción. Cree que lo tiene bajo control, pero...¿un asesino se puede controlar? Bueno, a ella no le gusta que sus victimas la tachen de asesina, homicida, inmoral, agresor, criminal, delincuente, sicaria, psicópata, en resumen no hay palabra que signifique muerte que no se la hayan dicho. ¿Pero que importa el que dirán? Ella se hace llamar selectiva y eso es lo único que debe importar. Es más, quien sospechará de la hija de un alcalde de una pequeña localidad y una jueza muy reconocida de Nueva York . *Ambos ausentes por supuesto* Pobre de Jho si alguien cuenta su pequeño y retorcido secretito, o pobre del que lo cuente. Neo, tú sigues. Pero ten cuidado, esta vez no te salvará ser el mejor amigo de Jho. "Toda su vida, la oveja le temió al lobo, pero fue el pastor quien se la comió"All Rights Reserved
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