-¿Qué pasará con nosotros?.- Dije con hilo de voz y sin muchas ganas de hablar. -Siempre volveré a ti.- Tomo mi cara entre sus manos, mis ojos no paraban de derramar lágrimas. -Eso no es suficiente yo te quiero a mi lado todos los días.- -Tú estás en mi corazón, a donde vaya estarás conmigo.- Trato de sonreír pero su rostro estaba destrozado. -No cambies.- Le dije sollozando. -No lo haré, pero por favor no llores.- Sus lágrimas seguían recorrieron sus mejillas y me volvió a abrazar fuertemente. Después de unos segundos me separe lentamente de él. -Es difícil dejarte ir con tus sueños, pero te esperaré aquí con el amor que te tengo- Sus ojos demostraban ternura combinada con tristeza, creo nunca antes lo había visto así, pareciera que esto fuera el fin de todo, una despedida para siempre. Me miró suplicante como si pidiera perdón. -Te amo mi amor.- Cerró sus ojos, se acercó a mí y sus labios enredaron los míos delicadamente. Ese a sido el te amo mas sincero que he podido escuchar en mi vida.