No sentir... dejar atrás toda tristeza, no soltar nunca ni una sola lágrima. Uno de los más profundos deseos de muchas personas, pero no saben que aquel sueño no es más que una maldición.
La soledad que te hace sentir no poder expresarte, que te llamen insensible por esto, no es tu culpa, simplemente no puedes. Aquellos sentimientos se acumulan en tu interior multiplicándose por cada segundo que pasa. Tener un mar de sentimientos en tu interior y no poder desahogarte es lo peor que puede pasarle a cualquier persona, una situación que volvería loco a cualquiera.
Saeng es un simple estudiante de universidad atrapado en aquel estilo de vida, los demás lo usan y desechan constantemente con la excusa de que no va a afectarle, aunque realmente no es así, le duele, se enfada, pero es incapaz de dejar fluir sus sentimientos. Este pobre chico, completamente rodeado de oscuridad vive humildemente ansiando por aquel destello de luz que le de calidez a sus días.
Kim nunca pensó que mentir en su currículum la llevaría a una completa travesía con su joven jefe.
Nico nunca pensó que darle una oportunidad a Kim la convertiría en el amor de su vida.