- ¡Solo te importan los estudios Jaison!, ¡vive un poco la vida!, ¡joder! - Me gritó Amber. Estaba ya harto de todo esto, ¡ella era insoportable!, ¡me sacaba de quicio!
- ¡Y a ti solo te importa pasarlo bien, salir de fiesta, beber, follar y dormir!, ¡¿yo quiero tener un futuro sabes?!, ¡y tu deberías preocuparte más por tus estudios! - Le grité poniéndome delante de ella haciendo que parara de andar.
- ¡YO VIVO EL PRESENTE! - Me chilló muy cerca mío. - ¡Me dejo llevar!, ¡Y tú deberías probarlo! - Esto era el colmo.
- Yo sé dejarme llevar. - Dije acercándome a ella.
- Si, claro. Ahora el chico bueno, estudioso y responsable va a dejarse llevar porque una chica mala, rebelde y mala estudiante se lo ha dicho. - Mofó empezando andar de nuevo, yo iba detrás de ella.
- Yo... - Murmuré. Era demasiado listo, maduro y responsable como para ''dejarme llevar''.
- ¡Por dios Jay, eres un adolescente! - Suspiró.
- Y tú eres una adolescente problemática. - Cuando dije aquello se dio la vuelta y se acerco a mí.
- Si... Lo soy, y no te conviene alguien como yo... - Susurró en mis labios. Me estaba poniendo muy nervioso, ¿acaso iba a besarme?... Ella rió. - Buenas noches Jay, - Se despidió antes de que me diera cuenta de que ya habíamos llegado hasta su moto. La vi alejarse mientras que el sol dejaba paso a la luna.
Mi vida cambió por completo cuando la conocí. Desde que soy... ¿amigo?, de ella, me he metido en muchos líos y problemas con mis amigos Diego y Kien y sus amigas Caroline y Daniela. ¿Qué voy a hacer con esta chica?