Los polos opuestos se atraen, o eso dicen. En medio de sus vidas caóticas ambos se encontraron. O mejor dicho, se miraron después de tanto tiempo conociéndose. -Niñata- dijo el con su voz ronca. -Creído- Soltó ella respondiéndole a su ataque. -Te encantó- soltó esa expresión propia de un engreído como lo era él, mientras se acercaba a ella poco a poco. Pero sobretodo, era peligroso para Anna. Acompáñame en esta historia de Anna Jones y Justin Brown.