EL AMANECER DE UN NUEVO OLIMPO
22 parts Ongoing Desde las cumbres etéreas donde los dioses moran, el Olimpo siempre había sido sinónimo de poderío, grandeza y, a menudo, de una turbulenta discordia. El reinado de Zeus, el Rey del Rayo, se había forjado entre la guerra contra los Titanes y salpicado por sus incontables amoríos, sembrando las semillas de la desconfianza y la furia en el corazón de su augusta esposa, Hera, la Reina del Cielo. Durante eones, su relación había sido un ciclo de traiciones y venganzas, un tormentoso ballet divino que resonaba en el destino de mortales e inmortales por igual, una quietud inusual comenzó a asentarse sobre la morada de los dioses. Tras siglos de conflicto, Zeus y Hera iniciaron un camino arduo y sinuoso hacia la reconciliación. Pequeños gestos de arrepentimiento por parte del Rey, una cautelosa apertura en el corazón herido de la Reina, fueron los primeros rayos de un nuevo amanecer en la relación de los soberanos olímpicos.
Sin embargo, la paz en el Olimpo siempre es un espejismo ante las maquinaciones de fuerzas ancestrales. Gea, la Madre Tierra primordial, resentida por el encarcelamiento de sus hijos Titanes, comenzó a agitar las profundidades del mundo, despertando a sus más terribles vástagos: los Gigantes. Bajo el liderazgo del colosal y obsesivo Porfirión, cuyo deseo por Hera quemaba con una llama oscura y vengativa, una nueva amenaza se cernía sobre el Olimpo, prometiendo una Gigantomaquia aún más devastadora que la primera.
Mientras los dioses se preparaban para la guerra, Zeus y Hera se encontraban en una encrucijada. La confianza, fragilmente reconstruida, sería puesta a prueba por las sombras del pasado y el terror del presente. Pero en la intimidad de sus aposentos, un secreto florecía, una promesa de futuro que cambiaría el significado de la batalla por venir. En el vientre de Hera, una nueva vida comenzaba a crecer, un legado de su redención, una chispa de esperanza en la inminente oscuridad.