En su rostro advertí realmente aquella niebla que suele subir siempre mientras dura la sensación de placer que produce el creerse por encima de otros Hay algo en la neblina que me cautiva, me apresa, me atrapa. En medio de la pared de luz blanca, ojos glaucos penetrantes estaban posisionados sobre mi persona, los mire... mire aquel profundo y frondoso bosque el cual explore por no recuerdo cuanto tiempo, ese pequeño lapso de tiempo me basto para poder perderme, en solo cuestión de segundos, mi corazón se aceleró creando asi una historia de amor...