En el pasado las tierras de los lobos eran dirigidas por la ley de la sangre y la fuerza bruta. Los Alfas gobernaban con puño de hierro sobre las manadas usando su más poderoso pero sucio don, la voz del alfa, pues todo aquel que la oía se veía forzado a obedecer incluso encontra de su propia voluntad. Eran los nobles al mando de todo y todos. Los Betas una línea de grandes y fuertes guerreros en favor a obedecer a los Alfas y morir en sus nombres de ser necesario. Ni voz ni voto sobre su propio ser, eran sirvientes de nacimiento. Cualquier Beta que se atreviera a desafiar al Alfa debía morir por su insubordinacion. Por último, los omegas, la cuna débil de esta pirámide. Nacidos con el único objetivo de satisfacer y dar cachorros a los Alfas (y algunos Betas de alto rango si su Alfa estaba de acuerdo). Su deber era seducir y complacer; sumisos y pequeños no poseían otra utilidad para sus manadas. Así era la pirámide social a la cual todos los lobos se sometían . Hasta que un día un suceso lo cambio todo. Los líderes descubrieron algo tan grande que hizo que se dieran cuenta de que todos debían ser iguales y vivir en armonia sin pasar unos sobre otros. Naturalmente a cierta comunidad de Alfas no les pareció y se rebelaron encontra de los lideres y los desafiaron por el dominio pero al ser menos en número y con magia más débil fueron derrotados y expulsados de las manadas. Furicos estos Alfas idearon un plan para crear su propio ejército con sus mismos ideales pero más grandes y fuertes dispuestos a retomar la supremacía de los Alfas y destruir aquello que demolio todo su estilo de vida. Tardara el tiempo que tardara. ¿Quieres saber que fue? Pasa, espero que te guste.All Rights Reserved