En muchas ocasiones las mejores lecciones de la vida no vienen de forma fácil, todos en diferentes momentos atravesamos situaciones que nos hacen reflexionar. Así poco a poco fueron surgiendo estos sencillos escritos, muchas veces partiendo desde el dolor de una perdida, un amor distante o de la desilusión de la soledad, por citar algunos ejemplos. Al final todos estamos hechos de pedacitos de realidades rotas.