Santiago Sprouse tenía 17 años cuando cometió su pecado, Detrás de ese horror hay una bella historia teñida de sangre y lágrimas, su pecado tiene un nombre, Eli O'Brien
Santiago es un joven como cualquiera sin embargo un día conoce una persona de la cual notaría un brillo especial pero con el tiempo descubriría que ese brillo alumbraría la vida de él y cambiaría su perspectiva para siempre.