Casey Whitmore es una chica solitaria y hostil, tanto en la escuela como con su madre, con quien vive desde hace unos años cuando sus padres se separaron. Pero ella tiene motivos para ser así, su mejor amigo la abandonó y la dejó sola en una jungla de torbellinos emocionales, y la única salida que encuentra es en algo que la conecte con su mejor amigo: las mutilaciones. Pero no todo es gris es su vida, porque tal vez si ella le hubiese prestado más atención al chico atrasado de su clase, aquel chico simpático y de agradables ojos, ella no hubiese caído en ese abismo de dolor. Y tal vez, él aún sabiendo que es tarde para solucionar algunas cosas, esté dispuesto a ayudarla aunque la misma muerte interfiera en la relación.