Mina salió con Hagakure al centro comercial y allí encontraron algo que no podían evitar compartir con todos sus compañeros, creando así un chisme que llegaría a los oídos del bicolor. Midoriya sabía que todo iba a salir mal apenas su amigo se enterara de lo que decía Mineta. Bakugou solo quería que lo dejaran porque él no era el único que podía usar la palabra matar en una frase. Esa mañana la clase A aprendió algo valioso y tuvo que ser por las malas.