Mientras que Hoseok no aceptara y dejara de ocultar su relación con Jimin nada estaría bien, no podría llegar a amarlo como Park lo hacia, sino asumía todos sus sentimientos y por mucho que diga que lo quería no cambiarían las cosas si el no aceptara su realidad, su relación de iría por el tacho de basura, o simplemente el enano se cansaría de esta sofocada situación. Tal vez estaba confundido, equivocado, o simplemente era un cobarde que no quería aceptar que amaba con locura a ese pequeño sumiso y delicado chico, con mejillas regordetas, labios abultados de color carmín, manos pequeñas y rellenitas que eran traviesas, y jugaban con el cabello lacio de Hoseok. Y su trasero rechoncho, bien formado para solo ser tocados por él, por Jung Hoseok. - Hoseok, Top! - Jimin. Bottom! Está es mi primera historia.... Espero que les guste¡! - No se permite adaptaciones ni copias. - 100% mía