-Gracias... -susurró. Cerró los ojos esperando a que todo pasara, que el dolor ya no existiera. Porque, si bien su mente nunca podría recordarla, su cuerpo tendría memoria, algo que se encargaría de nunca profundizar. Sólo así podría llevar una nueva vida, conscientes de sus actos antiguos, pero sin ninguna heroína de guerra sumada a la ecuación. -Obliviate... - pronunció Theo cuidadosamente. AUAll Rights Reserved