Alessia Green era la única hija de Michael Green. Trabajaba doble turno para pagar las deudas de su padre desempleado, pero no fue suficiente. Él la vendió a la mafia rusa; al clan Petrov, la mano derecha de la Bratvá. Al poco tiempo se casó con el nuevo jefe del clan y se volvió su dama. Al cabo de un año, en la mansión Petrov, se celebraba un compromiso y Alessia jamás pensó ver al medio hermano de su marido, conocido como el bastardo. Ese sacerdote solo iba a traerle problemas a su vida. Pero, ella estaba dispuesta a quemarse en el infierno con tal de conocer el pecado.