A veces la vida es simple, bastante normal, bastante aburrida. Pero a veces eso esto solo una caratula para el mundo, porque sabes que si ellos conocieran la verdad te tacharian de loca. Y la versad, no los podría culpar, ¿cómo culparlos cuando su propio padre lo ha hecho? Esta es la historia de Samantha, una historia bastante normal, bastante aburrida... A menos que sepas leer entre líneas. Esas líneas que nadie conoce. Esas líneas que sólo aparecen entre susurros, pequeños susurros que te erizan la piel, que te hielan la sangre si no estas acostumbrado a esta realidad. Incluso a ella le sigue haciendo temblar de vez en cuando, no es algo fácil de llevar. Bienvenidos a las tinieblas dentro de la ciudad. Pero cuidado, que el tiempo corre, y toda alma debe volver a donde pertenece. Nada es eterno ¿Cuánto estará dispuesta Samantha a sacrificar por un alma perdida? ¿Qué será capaz de hacer?