Es 2104, no queda nada de lo que era Estados Unidos. Des Styles llevaba 7 años al mando y había convertido Estados Unidos en una dictadura encubierta tras la imagen de una democrática República. Había instaurado la política más estricta y desorbitada jamás conocida en la historia de América, había levantado un muro que atravesaba verticalmente todo el territorio estadounidense. Dos Alas, y dos mundos totalmente diferentes. Lo que determinaba el lugar al que cada persona pertenecía en el territorio americano era la propia sexualidad. Cada año se realizaban unas pruebas a las personas que cumplían 16 años. Así, se determinaba tu sexualidad, te colocaban una pulsera para reconocerte, si tenías suerte y eras heterosexual, portarías una pulsera blanca y negra y continuarías con tu vida de ensueño en el Ala Oeste; sin embargo, si eras bisexual u homosexual se te colocaba una pulsera con los colores del arco iris y eras mandado al Ala Este. Todos los ciudadanos sin excepción debían pasar las pruebas y llevar una pulsera identificadora, todos menos uno. Harry Styles, el hijo del presidente portaba la pulsera blanca y negra sin haber tenido que pasar las pruebas. Jamás se pondría en duda la sexualidad del hijo del presidente. Al otro lado del muro, en Nashville, un joven idealista e inteligente soñaba con un futuro donde su sexualidad no fuera motivo de clasificación y condena a una vida de sufrimiento. ¿Qué pasaría si un día el curioso hijo del imponente presidente decide hurgar en los expedientes del Ala Este? ¿Y si quisiera saber más a fondo como era ese lugar y decide entrar camuflado en uno de los camiones de provisiones?All Rights Reserved