Te amó porque te odio, te odio porque te amó.

Del amor al odio solo hay un paso, y muchas veces no nos damos cuenta cuando eso sucede, el amor y el odio son los sentimientos más fuertes y profundos que el ser humano tiene y cuando se hacen presentes al mismo tiempo se convierten en un arma mortal capaz de destruir todo a su paso.

Nuestros protagonistas se ven envueltos en este estado de destrucción, miedo, dolor, incertidumbre, culpa, violencia, tristeza e infelicidad, sentimientos negativos que los llevan a lo inrremediable, a un final qué tal vez se pudo evitar.