Todo empezó un 12 de abril de 2016, sentí una falta de dinero, tenía deudas, no tenía ni para comer. Pero me llegó la idea más maliciosa de todas. Un secuestro, podíamos de forma fácil quitarle millones y millones de dólares a alguien desesperado por recuperar a su ser amado. Pensé que era una excelente idea, pero ¿que personas secuestraria? Mi mente por si sola respondió la pregunta. Niños. Padres desesperados pidiendo piedad por el regreso de su amado y querido hijo, dando cualquier cosa para que lo regresen a sus brazos. Esa era la mejor idea que pude haber tenido.
10 parts