Samantha vive en uno de los peores suburbios, es huérfana, y cuando pudo escapar del orfanato para vivir sola aparecen hombres con máscaras y capuchas que la meten en un auto y le inyectan algo que la adormece en segundos.
En un mundo donde todos ven a blanco y negro, pero para poder ver a color, deberán ver a los ojos al amor de su vida.
Samantha conoció al amor de su vida el día de su boda, pero no era precisamente su esposo Jacob...