Lo cliché nos atrae mucho,es lindo y adorable,no negaremos que nos agrada,pero... ¡Ya cansa demasiado! Es muy predecible lo que va a pasar a continuación,si no la secuestran y la violan es obvio que la tonta de nuestra protagonista se enamoré de su secuestrador,pero ella JAMAS va a padecer del Síndrome de Estocolmo,para nada. Escribir los típicos clichés es divertido,veamos cuantos pueden llegar a ser.