Los oscuros habían vivido en la ignorancia durante toda su existencia, adorando a dioses que solo los crearon por castigo a su desobediencia. Ahora que la puerta de la verdad estaba abierta tenían dos opciones luchar por lo que aman o seguir al usurpador. Brais tenia una misión, destruir a todo aquel que quisiera lastimar a sus seres amados, pero jamás pensó encontrar un camino distinto en el proceso.