"Él no es perfecto. Tú tampoco lo eres, y ninguno de los dos probablemente lo seréis. Pero si él puede hacerte reír al menos una vez, te hace pensar dos veces. Si admite ser humano y cometer errores, no le dejes ir y dale lo mejor de ti. Él no va a recitarte poesía, no está pensando en ti en todo momento, pero te dará una parte de él que sabe que podrías romper. No le lastimes, no le cambies, y no esperes de él más de lo que puede darte. No analices. Sonríe cuando te haga feliz, grita cuando te haga enfadar y échale de menos cuando no esté. Ama con todo tu ser cuando recibas su amor. Porque no existen los chicos perfectos, pero siempre habrá uno que es perfecto para ti.
¿Sabes qué?
Tú eres ese sin querer, ese mismo día, justo cuando los dos nos miramos a los ojos provocaste esa sensación de que algo se movía dentro de mi estómago, y sé que por muchas personas que conozca en el mundo no lo voy a sentir nunca más, tu eres el único por el que he sentido esa cosa extraña, pero a la vez, tan sincera y sé que no lo voy a volver a sentir, porque las cosas solo ocurren una vez."
Donde el corredor argentino, conocido por su facilidad para chamuyar, cae ante una chica Ferrari
Donde Julieta, sin querer, cae ante el argentino chamuyero