Los seres humanos tenemos creencias muy equivocadas, algunos creen que matar está mal y yo creo que no es así, y es que esas simples almas en pena jamás sabrían la satisfacción de quitar una vida y sentir como se desvanece en tus manos, ese poder que solo el que lo emplea puede entender, esa satisfacción que carcome cada parte de ti y te hace sentir pleno.
Mi nombre es Aurora, tengo 19 años y a mi corta edad he matado más personas de las que podría contar con los dedos de mis manos. ¿Algo malo según la sociedad retrógrada en la que vivo?, ninguna de esas muertes me pesa y mucho menos perturba mis sueños, todo lo contrario, me hace dormir como toda una bebé, lo que según la gente está mal visto, pero no me importa, es más, esas tonterías me tienen sin cuidado.
La mayoría me tacha de psicópata, de loca, desquiciada, en realidad de muchas cosas, ¿mi secreto?, es que están en lo correcto, él me lo hizo saber desde siempre y yo no me reuse, lo acepte porque sabía que es parte de mí y no puedo evitarlo. Además ellos son los raros que no pueden ver el mundo con claridad y se niegan a aceptar la verdad.
Este es mi mundo retorcido al cual les doy la bienvenida. Pónganse cómodos, porque esto apenas comienza.
Saint Adofaer es un hospital psiquiátrico de alta seguridad donde habitan los monstruos más oscuros de la mente humana: asesinos, manipuladores, criminales que se esconden detrás de una máscara de enfermedad.
Anthony Cadwell, un joven residente de psiquiatría, llega con un propósito claro: explorar los límites de la locura y entender lo incomprensible. Pero Saint Adofaer no es un lugar para comprender, es un lugar para resistir. En sus pasillos helados y bajo las luces estériles, conocerá a siete pacientes, cada uno una grieta en la humanidad, cada uno una forma distinta de perder la esperanza.
Pero será su última paciente quien lo marque para siempre. Una historia que sobrepasa todo diagnóstico, y que le enseña una verdad inquietante: los libros de medicina no lo enseñan todo.
¿Qué sucede cuando aquello que intentas salvar te susurra que nunca debió ser salvado?