MEMORIAS DE UNA MARIPOSA © (PRÓXIMAMENTE)

Rachel J. Harris fue diagnosticada al nacer con una enfermedad llamada "Piel de Mariposa", por la cual, tuvo que pasar su vida entera dentro de ese hospital.

Nació pesando 3 kilos y medio, con unos 33 centímetros de alto, y una piel tan sensible que si la tocabas, se rompía en mil pedazos, al igual que una hoja seca. Sus padres al ver que no podían darle los mimos que toda niña pequeña recibe al nacer, tuvieron que abstenerse y mandarle besos por el aire, mientras gruesas lágrimas caían de sus ojos.

Por mucho tiempo se mantuvieron así, pero, cuando Rachel fue creciendo -y su enfermedad con ella-, le pagaron a profesores que estaban dispuestos a instruir a la niña y le enseñaron todo lo que conlleva el estudio. -además de mostrarle un mundo en el que su cuerpo tristemente no encajaba. El tiempo pasó y su piel aun le daba problemas, pero ahora otro dolor aquejaba su cuerpo: Su Corazón. Trato en vano de buscarle la solución a ese desliz en su mente, hasta que la respuesta pasó frente a la puerta de su habitación: Jacob Smith -el chico nuevo.

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Ariel González, 2020.