La historia de una estatua dorada de un príncipe llena de valiosos adornos, que se encuentra en lo alto de una columna desde donde puede ver toda la ciudad; y de una golondrina, que ha retrasado su migración a Egipto por haberse enamorado de un junco. La golondrina, al posarse sobre la estatua, ve que el príncipe está llorando a causa de las injusticias que puede observar desde su posición, pues cuando vivía siempre le hicieron creer que todo el mundo era feliz...