-Eres, igual a ella. -habló aguantando aquellas lágrimas que amenazaban en salir. Le sostenía la mirada, su orgullo no le permitía despegarla a pesar de ser lo que su corazón aclamó con insistencia, Conway le había lastimado de la peor manera. El superintendente no sabía que hacer o cómo actuar ante aquella situación, no esperaba esa reacción de él.
-Yo nunca te pedí que me amaras -aquellas palabras fueron la gota que derramó el baso. Las lágrimas se desbordaron en silencio, la mirada de Icaro le hizo estremecer aunque logró permanecer firme como si no le afectara, el italiano le miró friamente, su ceño estaba fruncido y sus labios formaban una fina linea ligeramente curveada hacia abajo.
El superintendente dió un paso al frente, inconscientemente, sintiendo la necesidad de consolar al castaño quien había perdido la batalla contra sus propias lágrimas, las cuales brotaban silenciosas. El italiano se alejó, sin despegar su mirada de él, con el menton en alto con orgullo, el pelinegro apretó los puños ante esta acción
-No, -sentenció -no me lo pediste y como no lo hiciste... -aquél silencio le daba una mala sensación en la boca, a ambas personas - espero olvides todas las noches en las que presumía hacerlo.
El italiano salió de aquella sala, topándose con los demás, Horacio al ver su rostro se enfureció con el hombre del otro lado de la puerta, una vez más lo decepcionó alguien a quien alguna vez llamó papá.
El heterocromatico se levantó del suelo bajo la mirada de sus amigos y compañeros.
-¿Horacio? -preguntó Gustabo, curioso por lo que hacía, en ese momento volteo en dirección del italiano, comprendiendo la situación y como si de un perro fiel fuera, siguió a ambas personas a la salida de aquélla comisaría.
⚠ ︎ Esta historia se hizo con fines de entretenimiento, si no es de tu debido gusto te invito cordialmente a retirarte alguna otra historia que se adapte a tus gustos ⚠ ︎
El amor puede llegar de manera impredecible...
Para aquel Omega que por mucho tiempo creyó que lo había encontrado, vendrá en su demandante e imponente jefe alfa.
Para Jeon vendra en un Omega castaño lleno de un pasado trágico y con cicatrices del mismo.
Pero en medio de aquello estarán los gemelos que vienen en el vientre del Omega.
¿Será su amor un designio de la madre luna?
- Mención de violencia y abuso.
- M-preg.
No sé aceptan copias ni adaptaciones de esta historia.