New girl
-Eres un idiota.
- Tranquila preciosa, yo lo arreglo.
- ¡Te puedes ir al demonio!
- No puedo ir a ningún lugar sin ti, muñeca- se acerco a mi.
- Te dije que no me llamaras así- estábamos a centímetros, nuestras respiraciones se mezclaron, el se acerco más, ¡quería besarme!- No te atrevas.
- ¿Y si lo hago, qué?- dijo en un susurro. ¡Suficiente! Lo golpee en su amigo, haciendo que se gritara de dolor.
- Muy bien, ¿quieres jugar? ¡Que comience la guerra, lo lamentaras!- y sin más se fue.