Hasta los sueños más puros pueden verse corrompidos gracias a la mano egoísta del hombre. Naruto sonó con ser Hokage, soñó con ser respetado, soñó con ser reconocido, ¿la palabra clave? soñó, sí, todas sus jóvenes ilusiones quedaron en un sueño de algodón que la misma aldea se encargó de destruir. - no les espera nada más que la miseria- fueron las palabras que el joven Uzumaki pronunció antes de aceptar la mano de un desconocido hombre de bata negra y nubes rojas; ése fue el último día que se vio a Naruto Uzumaki. (No habrá Itanaru)All Rights Reserved