No temas a la inmensidad que nos rodea, no estás sola te lo juro, aunque cada uno viva su propia pelea, el tiempo y el espacio trabajan en conjunto. Vienes de eso que llaman caos, un bello espectáculo en el vacío, el milagro termodinámico que se resume en un solo nombre. Aquella inmensidad, aquella soledad que se presenta a media noche, te hace pensar y recordar todo lo que te esconde tu mente, y todo lo que deja ver al amanecer. No eres especial para nadie, no eres especial para el universo, no eres especial ni para ti... Es lo que te repites... Y eso es mentira, una burda mentira que no solo tu te la crees si no yo también. Y no es el echo de que lo seas o no, si no de que lo puedas creer, y lo único que necesitas es bañarte del fondo cósmico de microondas, ver de dónde has venido, ver, sentir y creer. Del caos es de dónde nosotros venimos y el orden, es lo que nos quita autenticidad, pero no significa que el orden sea malo, si no que, lo sea todo para nosotros. Luz de tu sonrisa y oscuridad en tu mente, y toda la alegría que me provoca el seguir viéndote viva. Porque estás viva... lo estás.