una Diosa llamada Deva (Celta del culto Agua), cuenta la Leyenda "...Se enamoro de un humano. Lamentablemente su amor solo duraría un mes, ya que el joven fue acecinado por el Dios Balor (Rey de los Demonios). Lo que aria el siniestro Rey, es maldecir su amor, para que el no pudiera reencarnar, hasta el fin de los tiempos. La encargada de realizar dicha maldición fue su fiel amante Morrigan (esta odiaba a Deva, porque le había robado el amor de su amo). Tras la unión entre el Rey del culto oscuro con la Diosa celta del culto agua, por medio de un casamiento por, conveniencia para que allá paz entre la tierra y el infierno. Balor cayó ante la belleza y bravura de la Diosa, perdidamente enamorado, siglo tras siglo trato de conquistarla, pero ella lo rechazaba o simplemente lo ignoraba. Al enterarse que su amada lo había traicionado con un simple mortal él, se volvió loco de celos, matar al mortal no sacio su sed de venganza, sino además desato su furia en contra de toda la humanidad. A si fue como la Diosa Deva, a pesar del dolor, que sentía por la pérdida de su amado, junto fuerzas de donde no tenia, para formar a un grupo de mujeres guerras las cuales llamo Valquirias. Fueron todas a enfrentan al siniestro Rey y su ejército de Raksasas (no muertos). Tras una gran Batalla, Deva es mortalmente herida por Balor, pero Ella pudo lograr sellar su alma, en una urna para que no pudiera regresar, mientras que Morrigan conservo el cuerpo de su amo.
En su lecho de muerte la Diosa les juro a sus Valquirias que regresaría, si el mal apareciera otra vez en su amada tierra. Para luchar junto a ellas, pero como reencarnaría, seria en una forma humana..."
Locura y grandeza son dos caras de la misma moneda y se dice que cada vez que un Targaryen nace, los dioses lanzan la moneda al aire y el mundo aguanta la respiración para ver de qué lado caerá.
Visenya Targaryen, la hija "bastarda" de Rhaenyra
La división de su familia en dos bandos no fue lo que la hizo caer en la locura, porque afortunadamente se encontraba del lado correcto. El detonante fue la inesperada muerte de su hermano menor, Lucerys Velaryon, a manos de la persona que ella creía amar, Aemond Targaryen.
Se dice que cuando supo la noticia, su tristeza e ira hizo que los dragones en Rocadragon y Desembarco del rey rugieran tan fuerte que la tierra retumbó, advirtiendo que la princesa finalmente había aceptado su destino de caer en la locura como sus antepasados y se reafirmó la teoría de que solo la casa Targaryen destruiría la casa misma.
La danza de dragones comenzó y los verdes no tenían donde esconderse de la princesa Visenya Targaryen. La mujer que iba a vengar a su familia con sangre y fuego.