La Oscuridad detrás del Velo

Todo el mundo tiene sus propios secretos. Sin embargo, estos no se miden por la acción sino por el tiempo en que se guardan, el silencio es lo que lo agrava y mientras más tiempo sellas tus labios, el golpe de la consecuencia dolerá aún más. Porque uno le sigue al otro y crea un círculo vicioso en el que el más mínimo detalle hace la diferencia.

"¿Que le dije a esta persona sobre lo que hice aquel día?"
"¿Qué le inventé a esta otra?"

"¿Qué me hice creer a mi misma?"

Y te vas convirtiendo en un secreto a voces. Uno más en la sociedad, y tu vida empieza a girar en torno a ello. Y tus noches y atardeceres te recuerdan su falta de credibilidad. El engañoso sol o la impredecible lluvia.

Y cuando ya te has convertido, empiezas a dudar nuevamente sobre los acontecimientos. Y acabas por darte cuenta de que, en tu nublada mente, el recuerdo de aquel día se ha vuelto borroso.

Ahora, ayúdame a descubrir:

"¿Qué hice esa noche?"