En la vida pasamos por tres etapas, el ser niño, el ser adolescente y el ser adulto. Dentro de esas tres etapas pasan demasiadas cosas felices, tristes, llenas de rabia, impotencia, suma alegría, dolor, traición y todas por las cuales normalmente pasamos.
Todos cuando niños desean ser grandes, pero... aquí estoy yo que soy la excepción porque la etapa que menos quería vivir era la adolescencia. Suena muy tonto ¿verdad?, pues lo sé, pero yo quería cambiar mi adolescencia por mi niñez.
El mundo se me cayó en pedazos cuando lo conocí porque sabía todo lo que él iba a traer a mi vida y no lo quería cerca, lo juro, ni a él ni a ninguno de ellos porque a todos los odiaba desde lo más profundo.
Pero me hizo saber que más nadie podía tocarme y hacerme sentir como podía solamente él.