Porque la presión es demasiada, y nadie nunca dijo que no íbamos a quebrarnos. ¿Alguien fue advertido de lo que este mundo nos hace?¿De cómo nos mastica y escupe como si fuésemos nada? Ciertamente, Yuri Plisetsky no lo fue. El contenido de esta historia puede dañar la sensibilidad de algunos lectores. Si la temática de los trastornos alimenticios te afecta, recomiendo no continuar con la lectura. Esta historia no avala ni romantiza los desórdenes alimenticios. El único objetivo es el de generar conciencia a partir del punto de vista de un individuo que los padece.