Ser un pinocho no es tan divertido como todos piensan, sobretodo si ni tú misma puedes controlar las estupideces que dices. Cuesta demasiado intentar no quedar en evidencia, pero cuesta más el saber que en cualquier momento vas a exagerar todo lo que dices por una tonta enfermedad. Sí, los pinochos sí existimos, nos llaman "mitómanos", pero si algo he aprendido con el paso de los años es lo siguiente: aquí todos mienten. Ranking: #1 en Mitomanía #5 en PinochoAll Rights Reserved