Prólogo Yo sólo quería una mejor vida, quería sentirme libre... El decía amarme, jamás pensé en las consecuencias, estaba en decadencia pero lo amo y por ese motivo no podía dejarlo sólo. Me prometía que cambiaría y que lo que hacía era por nosotras hasta aquella noche en la que incluso la vida de mi pequeña hija estuvo en peligro. Duele, por que parece casi increíble que alguien que juraba amor y cariño haya estado mintiendo. Pero no es lo único que lástima, por que lo que realmente duele es cuando te das cuenta que lo has perdido para siempre, y así me paso con Ian, toco fondo y ahora como buena esposa debo visitarlo en prisión, la vida me ha dado una lección de la cual no he aprendido aún... Por lo tanto, esto aún no acaba