Carl siempre había sido el buen chico de Rick, incluso después del violento accidente de su madre y el coma de cuatro meses de Rick. Pero bajo la superficie de sus excelentes calificaciones y sonrisas inocentes acecha a un Carl más trastornado y voraz. Sin saberlo su padre, él y su psiquiatra, el Dr. Negan, acaban de empezar a causar estragos. O Carl y Negan son unos malditos psicópatas y Rick no puede evitar caer en el fuego con ellos.