"Cuenta una leyenda oriental que las personas destinadas a conocerse están conectadas por un hilo rojo invisible. Este hilo nunca desaparece y permanece constantemente atado a sus dedos, a pesar del tiempo y la distancia. No importa lo que tardes en conocer a esa persona, no importa el tiempo que pases sin verla... ni siquiera importa si están a un mundo de distancia: el hilo se estirará hasta el infinito pero nunca se romperá. «Nunca podrás escapar de tu corazón, así que es mejor que escuches lo que tiene que decirte...» -Paulo Coelho-"