Una desaparición. Un pueblo de ricos. Una guerra entre dos familias de poder que pronto recae sobre sus hijos y pone en peligro sus amistades.
La llegada de un nuevo inspector y su hijo adolescente cambian las reglas del juego. Un amor en puerta que pondrá en peligro la investigación.
Secretos, misterio, fiestas, alcohol, droga, narcotráfico, corrupción, traiciones, abuso, lealtad, amistades y sobre todo, el veneno de un amor. Detrás de la cara más bonita, puede esconderse el peor de los demonios. Ese es el sabor de sus labios, labios de sangre.
¿Puede una chica romántica y delicada enamorarse de alguien tan ruda como Lynn Loud? Issabella Abrams era esa chica: amante del color rosa, del maquillaje, la poesía, y de las historias de amor. Todo lo contrario a Lynn Loud, quien prefería la acción, los deportes y no se preocupaba demasiado por lo sentimental.
A pesar de sus diferencias, había algo en Lynn que atraía a Issabella. Tal vez era su valentía o su determinación, o quizás el hecho de que Lynn no temía ser exactamente quien era. Mientras que Lynn también sentía cierto interés en Issabella, no entendía como no podía tentarse en ganar y ser la número uno, veía que ella era como una suave brisa que acariciaba el rostro hasta de quien no merecía con dulzura, dulzura que raramente a Lynn le encantaba.