James Sirius Potter no tenía nada en contra de la las reglas, las creía necesarias, creía que existían por una razón, pero... ¿Que clase de Potter sería si cumpliese con ellas? El ama a su familia y por lo tanto siguió el legado familiar de no cumplir con ellas.
Excepto por una, una a la que creyó necesaria no sólo por el hecho de que fuera una maldición familiar o por el hecho de que estaba casi destinado a cumplirse, aunque, en eso no se equivocó.
Tenía más que que ver con que ella parecía una princesa incluso cuando le gritaba o lanzaba libros, zapatos o lo que tuviera a la mano.
Y aquí estamos, bueno, aquí estoy, bailando con la chica de mis sueños, mi alma gemela, el amor de mi vida, mi pelirroja... Sin lograr apartar la mirada de la bella princesa que acaba de entrar a la carpa.
Luke, un niño de 13 años amante de todo tipo de novelas, series y mangas, muere y reencarna en el mundo de Wednesday con poderes psíquicos por encima de la media.
Mientras se sumerge en el mundo de los marginados y los monstruos, descubrirá que no es tan simple como parece. Luke en su nueva vida es descendiente del famoso escritor Edgar Allan Poe y debe lidiar con un viejo rencor familiar.