Hay momentos en los que por una u otra razón te alejas de las personas a quienes quieres o amas, para otros es sencillo regresar a sus amistades o familiares porque son buscados o llamados constantemente, en cambio para mí, es otra historia.
Por momentos siento ahogarme en un vaso de agua llamado soledad, aún habiendo charlado con una sola persona al menos, no me siento plena. Si bien es sabido que cualquiera me identificaría como la típica chica a la que no le gusta estar sola, yo simplemente pienso que quizás sí necesito un poco de amor o cariño, completamente verdadero.
Sin embargo, con el pasar del tiempo me he ido acostumbrando a cada desgracia que ocurre en mi vida, los momentos de alegría aunque son pocos, también son muy breves y muchos dirían "tienes pareja, acaso no te encuentras bien con tu novio?" pues sí, sí me siento bien en mi relación, mi novio siempre ha estado para mí en todos los momentos difíciles de mi vida, pero eso no quita ni hace olvidar las mil y un peleas que hemos tenido.
Después de mucho nadar, he llegado a la orilla y puedo asegurarles que me amo mucho más a mí que a cualquier persona, yo soy mi prioridad sin llegar a ser egoísta.
La soledad me ha tratado bien.
Segunda parte de "Entendido, Profesora".
En la universidad y después de el tiempo juntas la relación de Angela y Elena está más fuerte que nunca.
Hasta que aquel intercambio fue anunciado, hasta que aquella joven extranjera llegó a la ciudad.
La confianza de Elena en Angela será puesta a prueba, tendrá que tomar la decisión de confiar en su mujer o dejarse envenenar por los malos comentarios.