"... y las llamaban locas, y se reían, y se mofaban, las molestaban, las golpeaban, gozaban con su sufrimiento. - Un buen hombre es lo que te hace falta para que dejes de andar de marimacha. Pero nunca les importó, porque aquella sensación de dulzura y calidez que emanaba su cercanía, era más grande que la locura colectiva que daba efecto a su tan grande y apasionado amor." ⚠ ADVERTENCIA CONTENIDO R+18⚠ Esta historia contiene lenguaje explícito, situaciones sexuales gráficas de índole homosexual. Se recomienda discreción.All Rights Reserved