Después de estar 2 años fuera de mi país natal, decido volver para poder ver a mi familia, pero cuando llego al pueblo donde viven mis padres y donde me crie, sé que no he tomado la mejor decisión del mundo debido al encuentro que tengo con él, el hijo del alcalde del pueblo que aparte, por si fuera poco, también es el dueño de medio pueblo y el chico que me hacia la vida imposible -No puedes aparcar el coche ahí- me dice él, mientras que yo estoy rezando por dentro para que no me reconozca, aunque hayan pasados dos años. Sin intención de contestarle, empiezo a caminar para entrar en casa de mis padres, cuando el vuelve hablar -Si piensas que no te he reconocido Alina estas equivocada- cuando termina de decirlo le noto detrás de mí, demasiado cerca para mi gusto- me encanta saber que has vuelto y que este verano va a ser muy interesante- termina diciendo y pasa por al lado mío para irse a su casa. Y mientras le veo caminar, sé que no he hecho bien en volver al pueblo y lo único en lo que puedo pensar es en cómo voy a sobrevivir al verano, sabiendo que Oliver Pascual sabe que he vuelto.