La universidad puede ser tu cárcel o tu casa, para Danna es un poco de las dos, ama su carrera pero le fastidia despertar temprano, a diferencia de Dante, que vive despreocupado de horarios, porque es puntual aunque entrega tareas mediocres, para él, la universidad es su segundo hogar. A pesar de las diferencias entre ellos, la química entre ambos era indiscutible, todos sabían que tarde o temprano iban a enamorarse y para la estabilidad de Danna, eso fue muy duro.Todos los derechos reservados
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