Angelina Cortés sueña con volver a ver a su amigo imaginario de la infancia, quien desapareció sin avisar a sus catorce años. Sin embargo, una buena jugada de la vida podrá convertir su deseo en una realidad.
Desde que tuve ese sueño nada fue igual, pensaba que había sido solo una mala pasada de mi subconsciente pero poco a poco fueron encajando cosas que jamás imaginaría y después de los 18 él aparece y dice que lo entenderé todo, estoy acojonada.