Fumar, tomar, y follar, esas eran las tres nesesidades de un cuerpo adolescente.
Puede que si, puede que no, pero para Levi, eso era lo mejor.
No habia nada mas exquisito que sus vicios, sentir el humo entrar y llenar sus pulmones, saborear ese líquido pasar por su garganta y embriagarlo y disfrutar un cuerpo mientras llegaba el orgasmo.
Bueno, para el eso era bueno, además que se podria esperar de él, era hijo de una mujer que trabajaba en la zona roja, su madre murió cuando el tenia 5 años, su tio se habia encargado de él, pero practicamente, ambos fueron un desastre, ni Levi era un chico dulce, ni Kenny un amoroso padre, pero habian logrado sobrevivir.
A Los 22 años, Levi trabajaba en un almacen, habia dejado la universidad ya que él y los estudios no eran compatibles.
Su vida era monótona, despertar, comer, tabajar, tomar,fumar, y follar, pero todo cambia cuando un dia llega él, esa persona que logro intigrarlo pero toda cara tiene dos monedas y él no se conformaría con solo una...