Madea, de increíble atractivo, como su mamá, pero eso es lo que a veces logra molestarle; el que la comparen con ella. Es consciente de que trata de ser perfecta como su progenitora lo pide, y, cuando su vida da un cambio ligeramente radical al entrar en una universidad en otro país, su perfección se agrieta de forma notable. ¿Acaso el chico de intercambio con el que compartirá dormitorio tendrá que ver con eso? Bueno, probablemente tengas que leer su historia para averiguarlo.