Jimin, un pequeño omega, se levantó como siempre. Comió como siempre. Fue a trabajar como siempre. Pero no salió de trabajar como siempre. Goemul, la mafia local, le secuestra. Estando secuestrado en la guarida de unos mafiosos alfas, presidida por Kim Namjoon (el alfa más alfa del universo), el celo de Jimin decide que es buen momento para bajar. Poco puede hacer Jimin contra Namjoon bajo el efecto de las feromonas.