Era un experto en mentir, lo había hecho con su fallecido marido sin problema. Pero esos ojos tan hermosos, que parecían llegar hasta lo más profundo de su alma, le hicieron dudar. ¿Podría mentirle a ese hombre que le declaraba su amor con tanta facilidad y romper ese corazón tan preciado? ¿Lo haría solo por dinero?