La miré a los ojos,esos ojos castaños claros en los que suelo perderme,fue allí cuando me di cuenta de lo inútil que es ser mudo,de lo imposible que es acabar con ella en algo más que amigos. Tomé su mano e intenté descifrar su expresión,corrió la mirada asonrojada,tomé su mentón y la "obligue"a que me viera,sonreí,me sonrió y entendí que debía hacer lo posible para ser la razón de aquel gesto,durante toda mi vida. -romanticismo-All Rights Reserved